Es conveniente entender la importancia de la planificación de la protección y la protección social con vistas a la jubilación, ya que en el contexto actual en el que se encuentra España hay que tener en cuenta unos datos más que preocupantes para explicar porque la protección social complementaria es necesaria.
- La población mayor de 64 años se duplicará en 40 años.
- El grupo de ciudadanos en edad de trabajar pasará a suponer el 52,7% del total.
- La población entre 0 y 15 años supondrá el 15,4%.
- La población mayor de 64 años supondrá el 31,9%.
- La población potencialmente activa será el 52,7%, frente al 67,6% actual.
- Por cada 10 personas en edad de trabajar, en 2049 habrá casi 9 personas potencialmente inactivas.
- La actual tasa de dependencia es del 47,8% y se espera que se eleve hasta el 89,6%.
- La tasa media de hijos pasará de 1,44 a 1,71 por mujer.
- La esperanza de vida al nacimiento alcanzará los 84,3 años en los varones y los 89,9 años en las mujeres en 2048.
- El saldo migratorio externo será 2,6 millones de llegadas netas en los próximos 40 años.
- Mientras la población española en 2009 estaba compuesta por 45.828.172 personas, en 2049 se espera que sea de 47.966.653.
Situaciación actual de la protección social
Un 9% de la población española padece alguna discapacidad, es decir, más de 3.500.000 de personas. De estas personas con discapacidad, un 40% tiene entre 6 y 64 años. Si a este dato añadimos la creciente tasa de desempleo y la reducción del número de afiliados de la Seguridad Social, vemos como los ingresos destinados a la protección social se reduce progresivamente.
Planificación de la protección
La planificación de la protección facilita la cobertura del riesgo personal y patrimonial, y su posterior gestión, mediante la contratación de seguros y el uso de técnicas actuariales.
Dependiendo de la edad, se contratan ciertas coberturas:
- Entre los 25 y 50 años: seguros de vida, seguros de asistencia sanitaria y seguros de desempleo.
- Entre los 50 y 60 años: seguros de asistencia sanitaria y provisión de dependencia.
- A partir de los 60 años: seguros de asistencia sanitaria, provisión de dependencia y productos de previsión social.
Fases del proceso de planificación:
- Proceso de priorización.
- Cuantificar necesidades.
- Análisis de los contratos de protección existentes.
- Estudio de los productos de protección.
- Evaluación de los productos de protección.
- Elaboración del Plan de Protección.
- Presentación de recomendaciones.
Entre los productos de protección más contratados encontramos los seguros de vida riesgo, los de accidentes, seguros del hogar, seguros médicos, seguros de dependencia y los seguros de protección de negocios y empresas.
Planificación de la jubilación
¿Cómo planificarnos para la jubilación?. Se recomienda los productos de jubilación con el que gestionar nuestros ahorros y complementar la pensión de jubilación para así conservar nuestro poder adquisitivo, como por ejemplo:
- Planes de pensiones.
- Planes de jubilación.
- Unit Linked.
- Plan de previsión asegurado.
- Plan individual de ahorro sistemático (PIAS).
- Seguros de vida inversión.
- Seguros de renta.